Limpieza de alcantarillas

Las redes de alcantarillado suelen ser uno de los lugares a los que llegan residuos orgánicos e inorgánicos o de lenta descomposición que se van acumulando hasta provocar atascos que pueden generar focos de infección, plagas o inundaciones.

¿Qué hay que hacer para evitar estas consecuencias? Contratar a una empresa como Desatascos Vactor, especialista en el mantenimiento y la limpieza de alcantarillas, tuberías y arquetas. Una buena labor de prevención evitará más de un susto en su alcantarillado.

¿Cómo se hace la limpieza de alcantarillas?

Lo primero que hay que saber es que la limpieza del alcantarillado va mucho más allá de una simple limpieza de la estructura de la vivienda, ya que implica muchas más zonas a las que solo puede llegar una empresa especializada.

La limpieza del alcantarillado implica limpiar también las acometidas, las arquetas, los albañales, las tuberías o los entronques. Muchas de estas zonas están ocultas dentro de la estructura de los edificios y solo un equipo profesional puede llegar hasta ellas.

Este equipo profesional debe estar compuesto por:

Camiones cisterna que bombeen el agua a muy altas presiones para que destruyan todo lo que encuentren.

Un método natural y respetuoso con el medio ambiente.

Toberas y diferentes tipos de utillaje que trituren piedras, trozos de ladrillos, cemento, raíces de árboles.

Camiones basculantes que dispongan de cubetas y equipos de absorción de lodos y otros restos.

¿Cuándo se debe realizar la limpieza de las redes de alcantarillado?

La periodicidad de la limpieza de las alcantarillas varía en función de si se trata del propietario de una vivienda o encargado de una comunidad, a si se trata de un ayuntamiento. En el segundo caso, el propio ayuntamiento tendrá que tener programado un calendario para realizar este tipo de trabajos.

En el caso de los propietarios también se deberían realizar limpiezas, más o menos, periódicas; pero no siempre es posible. Algunas señales a las que debes estar atento son:

Sonidos burbujeantes.

Lentitud en el descenso del agua por los desagües.

Malos olores.

Retorno de aguas residuales.